El 5 de octubre, la ADHRB realizó una intervención oral en la sesión 48 del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en el punto 9 para plantear la discriminación religiosa sistemática en Bahréin durante la Ashora.
Señora Presidenta,
Nos gustaría plantear nuestra profunda preocupación por la discriminación religiosa sistemática a la que se enfrentan los ciudadanos chiíes de Bahréin, especialmente durante la temporada religiosa de Ashura.
El gobierno de Al-Khalifa en Bahréin ha estado discriminando a los ciudadanos chiítas en un esfuerzo por suprimir sus demandas de autodeterminación. Esta discriminación fue evidente durante la conmemoración del mes sagrado de Moharram.
El gobierno convocó y detuvo a muchos clérigos religiosos porque consideraba que sus sermones eran demasiado críticos con el gobierno o no se ajustaban a los temas de conversación o a la agenda del gobierno. Atacar y detener a personas por sus creencias religiosas es un error y debe ser condenado por este Consejo.
Por ejemplo, un destacado clérigo chiíta, Shaikh Zuhar Ashor, ha sido recluido en régimen de aislamiento como castigo por insistir en practicar su fe y ayudar a otros presos en su vida espiritual. Varios titulares de mandatos, como el Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Involuntarias y Forzadas y el Grupo de Trabajo sobre Detenciones Arbitrarias, entre otros, plantearon su caso al gobierno de Bahréin el pasado agosto.
Está claro que la discriminación sistemática contra los indígenas de Bahréin es algo en lo que la tribu gobernante de los Al-Khalifa lleva años participando. Por ello, pedimos al Consejo que designe un relator especial para Bahréin que supervise e informe al Consejo sobre las violaciones de derechos humanos profundamente arraigadas que comete la tribu gobernante de los Al-Khalifa en Bahréin.