Tras la iniciativa lanzada por la ADHRB junto con la diputada francesa Frédérique Dumas, otros 15 diputados de la Assemblée Nationale (cámara baja), han respaldado una carta dirigida al embajador de Francia en Bahréin. Esta carta le alerta de las deplorables condiciones a las que se enfrentan los detenidos, y en particular los presos de conciencia, en las cárceles de Bahréin.
La carta completa puede leerse aquí [Español / oficial Fr].
La diputada Dumas y sus compañeros han arrojado luz sobre la realidad de las «penas alternativas» que fueron aplaudidas por el embajador francés, Sr. Jérôme Cauchard, a finales de marzo. El programa de penas alternativas permite al gobierno bahreiní callar aún más a la oposición política. De hecho, alega la liberación total de los presos de conciencia detenidos. Sin embargo, en realidad estos presos son sometidos a un arresto domiciliario arbitrario y se les impide así ejercer sus derechos más fundamentales.
Este es, por ejemplo, el caso de Nabeel Rajab. Nabeel Rajab es un destacado defensor de los derechos humanos y presidente del Centro de Derechos Humanos de Bahréin. Formó parte del movimiento prodemocrático de 2011. Por estos motivos ha sido blanco de ataques, acoso y encarcelamiento en varias ocasiones. Salió de la cárcel en 2020, pero ahora está sometido al programa de penas alternativas.
Los 16 diputados también condenaron el trato que reciben los presos de conciencia que siguen siendo encarcelados y torturados en centros de detención. El ejemplo más reciente de estas horrendas condiciones es el ataque a la prisión de Jau el 17 de abril de 2021, llevado a cabo por las autoridades penitenciarias. Este brutal ataque provocó la desaparición forzada de 70 presos.
Estos diputados citan la información proporcionada por expertos internacionales, incluido el personal de la ADHRB y sus fuentes. Denuncian las violaciones de numerosos tratados internacionales de derechos humanos, como la Convención contra la Tortura y las Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos (Reglas Nelson Mandela).
La carta señala el deterioro de la situación sanitaria en relación con la pandemia de COVID-19. En primer lugar, el Ministerio del Interior (MdI) ha sido extremadamente impreciso sobre el número real de presos infectados y en peligro por el virus. En segundo lugar, los diputados franceses están alarmados por los informes que detallan las condiciones y prácticas insalubres de las cárceles, como «el confinamiento en celdas 24/7, con una sola comida al día, y la falta de atención médica adecuada».
Los diputados han pedido al embajador que discuta estas cuestiones con las autoridades bahreiníes. Afirman explícitamente:
«Francia debe mantener un verdadero diálogo con las autoridades bahreiníes, y este diálogo debe celebrarse a nivel local. Asimismo, señor embajador, me gustaría saber si ha podido mantener un diálogo tranquilo pero firme con las autoridades locales de Bahrein sobre la cuestión de las condiciones de detención de los presos durante esta pandemia mundial. Me gustaría saber si ha podido obtener alguna información sobre los sucesos de la prisión de Jaw del 17 de abril de 2021 durante su reciente visita al recién construido edificio 21, que obtuvo por invitación del Ministerio del Interior de Bahrein.»
Acerca de la carta, Husain Abdulla, director ejecutivo de Americans for Democracy & Human Rights in Bahrain (ADHRB), comentó: «Dada la reciente situación en los centros penitenciarios de Bahrein y las penurias a las que se enfrentan especialmente los presos de conciencia, esta carta debería garantizar que las preocupaciones por los derechos humanos no sean desdeñadas en cualquier intercambio futuro entre representantes franceses y bahreiníes. Los derechos humanos son la base de la democracia francesa; los embajadores deben salvaguardar estos valores y tratarlos públicamente con los Estados abusivos».