5 de marzo de 2021- El gobierno de Biden debe actuar de acuerdo con las promesas de campaña del presidente y restablecer los derechos humanos «como una característica clave de la diplomacia estadounidense» en Bahréin y en el Golfo Pérsico, a la luz del dramático deterioro del historial de derechos del país durante la anterior administración estadounidense, declararon 15 grupos de derechos humanos, entre ellos American for Democracy and Human Rights in Bahrain (ADHRB) y Amnistía Internacional y Freedom House, en una carta abierta enviada al secretario de Estado Anthony Blinken el 4 de marzo.
La llegada de la administración Trump en 2017 «anunció una represión gubernamental sin precedentes» en Bahréin que continúa hasta hoy, con los gobernantes de Bahréin «envalentonados» por el desprecio público del presidente Trump por las normas internacionales de derechos humanos. En el periodo intermedio, Bahréin ha reinstaurado la pena de muerte y ha llevado a cabo seis ejecuciones, ha ilegalizado los medios de comunicación independientes y los partidos políticos de la oposición y ha tomado como objetivo a líderes políticos, defensores de los derechos humanos y otras figuras de la sociedad civil. Trump también ha incrementado significativamente la venta de armas a Bahréin, con exportaciones por un total de 8.500 millones de dólares durante su administración, a pesar de la participación de Bahréin en la guerra liderada por Arabia Saudí contra Yemen, descrita por la ONU como la «peor crisis humanitaria del mundo».
El gobierno de Biden debe instar a Bahréin a rescindir las restricciones impuestas a la sociedad civil, a dar verdaderos pasos hacia la reforma de la justicia y el restablecimiento de los derechos civiles y a restablecer las restricciones a la venta de armas a Bahréin hasta que mejore el historial de derechos del país. Los funcionarios estadounidenses también deben solicitar visitas a los presos políticos de Bahréin y pedir públicamente la liberación de todos los encarcelados en el país por ejercer pacíficamente su derecho a la libertad de expresión, de reunión pacífica y de asociación, en particular los líderes encarcelados del levantamiento de la Primavera Árabe de 2011 en Bahréin, como Hassan Mushaima, Abduljalil AlSingace, Abdulhadi AlKhawaja, Sheikh AlMuqdad y Abdulwahab Husain.
Lea la carta completa aquí traducida al español.
Husain Abdulla, director ejecutivo de Americans for Democracy and Human Rights (ADHRB), comentó: «La era Trump será recordada como el periodo más sangriento desde el levantamiento de Bahréin de 2011, demostrando lo que ocurre cuando los aliados occidentales de Bahréin consienten a los dictadores y hacen la vista gorda ante los abusos. Para que la situación de los derechos humanos en Bahréin mejore, el gobierno de Biden debe pedir cuentas a los bahreiníes y dejar claro que los derechos humanos vuelven a estar en la agenda.»
Sayed Ahmed Alwadaei, Director de Promoción de BIRD, comentó: «Aunque Estados Unidos profesa su apoyo a los derechos humanos en todo el mundo, las preocupaciones geopolíticas siempre han triunfado sobre los ideales cuando se trata de la política estadounidense en Bahréin. Ha pasado una década desde el levantamiento de la Primavera Árabe de Bahréin y sus líderes siguen en el exilio o entre rejas. Hasta que la política estadounidense en Bahréin no se centre en resolver las consecuencias de 2011 y en impulsar la reforma democrática, la crisis política del país seguirá sin resolverse.»